El jueves 8 de diciembre se iluminó el Árbol Navideño ubicado en la Plaza Sarmiento. En esta ocasión seguimos con los conceptos de sustentabilidad y participación ciudadana. Más de 60 farolas, rescatadas y reacondicionadas por personal municipal en el recambio lumínico en distintos sectores de nuestra ciudad, vuelven a ser luz e iluminar desde otro lugar en este tiempo especial de Navidad, simbolizando la renovación de energía y esperanza.

“Quiero destacar el trabajo de todas las personas que participaron en el armado de nuestro Árbol Navidad, el árbol de todos, ideándolo con compromiso y amigables con el ambiente”, sostuvo Darío Schneider durante el encendido. Al tiempo que remarcó que la intención y significado religioso de este árbol, al igual que el armado en nuestros hogares, es para “compartir un momento espiritual de tiempo Navideño y renovar las esperanzas en el tiempo que se viene”.

La velada contó con la participación musical de María Paz Velázquez (voz) y Eduardo Retamar (piano), quienes interpretaron ‘Noche de Paz’ de Franz Grubert.

Crespo se distingue como ciudad por los valores de sus habitantes: esfuerzo, compromiso, trabajo, solidaridad, respeto, cuidado ambiental y empatía. Todos ellos reflejados en tantas acciones y construcciones concretadas este año, que nos llenan de orgullo como comunidad. Lo cual también se refleja en nuestro Árbol de Navidad, que construimos entre todos.

Con la energía que nos caracteriza a los crespenses, deseamos que el nuevo año que asoma nos encuentre juntos, con nuevos proyectos, más trabajo, progreso, tolerancia y unión para todos. Que este árbol sea el símbolo del fortalecimiento de los valores y virtudes que nos destacan como sociedad.